Fernando Pintado nació para tocar el bajo. A mediados de los 80 ya andaba subido a los escenarios dando caña con su instrumento, con el que mostró siempre una elegante sobriedad y un talento que el paso del tiempo y su alejamiento de la música durante una excesivamente larga temporada, han sabido respetar y mantener intactos.​

En 1985 se incorpora a Falsa Impresión, grupo que Jose Subías acababa de formar y con el que llegarían a las semifinales del Villa de Madrid un año después; apenas unos meses antes de abandonar la formación, la cual adoptaría entonces un nuevo nombre, El Drama, que esta vez sí se alzaría con el primer premio de aquel famoso trofeo de pop-rock, en 1987.

 

Debieron pasar más de veinte años para que Pintado volviera a sentir la llamada de la música, y esto volvió a ocurrir de nuevo de la mano de Jose Subías, quien en 2010 había vuelto a los escenarios, en un intento fallido de resucitar a El Drama. El flechazo volvió a ser instantáneo, y Fernando no tardaría en incorporarse como bajista a esta nueva formación de Subías, con la que llegó a dar un par de conciertos.

Tras la disolución definitiva de la banda, Pintado siguió colaborando con Jose en la grabación casera de sus temas, con la intención de que estos no se perdieran, mientras lo animaba a crear de nuevo un grupo. Así surgió La Rendición de Brenda, que a comienzos de 2012 ya buscaba al resto de sus componentes y en poco tiempo estuvo formada y dispuesta para dar su primer concierto.